Devocional Diario: "Anda delante de mí y sé perfecto" (Génesis 17:1).

"Anda delante de mí y sé perfecto" (Génesis 17:1).

Mucho se habla sobre la santidad, pero pocos comprenden su verdadera esencia. Ser santo es andar con Dios, como hizo Enoc: vivir con un solo propósito, agradar al Padre. Cuando el corazón se fija en ese único objetivo, la vida se vuelve sencilla y llena de sentido. Muchos se conforman con ser solo perdonados, pero pierden el privilegio de caminar lado a lado con el Creador, sintiendo el gozo de Su presencia en cada paso.

Esa comunión profunda florece cuando elegimos vivir según los magníficos mandamientos del Altísimo. La santidad no es solo un sentimiento interior, sino una práctica constante de obediencia, un caminar diario en armonía con la voluntad de Dios. Quien guarda Sus palabras descubre que cada acto de fidelidad es un paso más cerca del corazón del Padre.

Así que, decide hoy andar con Dios. Busca agradarle en todo, y Su presencia se convertirá en tu mayor alegría. El Padre se complace en quienes Le obedecen y los conduce al Hijo, donde la verdadera santidad se transforma en comunión eterna. Adaptado de D. L. Moody. Hasta mañana, si el Señor nos lo permite.

Ora conmigo: Padre amado, te alabo porque me llamas a andar Contigo en santidad y amor. Enséñame a vivir con el corazón enfocado solo en Ti.

Señor, guíame para que cumpla Tus magníficos mandamientos y aprenda a agradarte en cada pensamiento, palabra y acción.

Oh, Dios querido, te agradezco porque me llamas no solo a ser perdonado, sino a caminar Contigo todos los días. Tu amado Hijo es mi eterno Príncipe y Salvador. Tu poderosa Ley es el camino de la santidad. Tus mandamientos son los pasos firmes que me acercan a Tu corazón. Oro en el precioso nombre de Jesús, amén.



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